Valeria Maciel: Periodista y Amazona, o ¿Amazona y Periodista?

Valeria Maciel es una destacada periodista y amazona brasileña, nacida en “Santana do Livramento”, una región donde la conexión entre el caballo y el campo está profundamente arraigada. Y al conocerla, es difícil saber, que es primero, si periodista o amazona. Ya que su pasión se contagía hablando como periodista o desde la silla de un caballo.

Como ella misma dice, “lleva el campo en el alma”, una frase que refleja su amor y dedicación al mundo ecuestre, desde muy pequeña. Creció en un entorno donde su madre criaba animales, lo que le permitió montar a caballo y tener una muy buena conexión con ellos. Aprendió desde muy joven a montar para las tareas del campo, ya sea trabajando con el ganado, arreando animales y también disfrutando del caballo en paseos por la naturaleza.

Su carrera profesional despegó cuando, como presentadora, fue invitada a realizar programas sobre el caballo de raza criollo. Este fue el inicio de una trayectoria que ya supera los 20 años, convirtiéndola en un referente no solo en Brasil, sino que es conocida en toda América Latina. Su profundo conocimiento y pasión por los caballos, no tardó en traspasar las fronteras.

Con una comunidad de 173 mil seguidores en Instagram y más de 600 mil suscriptores en su canal de YouTube, Valeria ha logrado conectar con un amplio público, compartiendo su amor por los caballos y su experiencia en el ámbito ecuestre. Su trabajo es su vida; incluso durante sus vacaciones, no puede evitar sumergirse en el mundo de los caballos, buscando siempre algo nuevo que aprender o compartir.

En sus reportajes, Valeria destaca la importancia del bienestar animal en las competencias, subrayando cómo los criadores y domadores cuidan y miman a los caballos. Además, resalta el papel del caballo como compañero terapéutico, especialmente en el tratamiento de condiciones como el autismo y lesiones neurológicas, mostrando así su compromiso no solo con el deporte ecuestre, sino también con el bienestar de los animales y su impacto positivo en la vida de las personas.

Valeria Maciel es, sin duda, una voz influyente en el mundo ecuestre, inspirando a muchos con su pasión y dedicación. Acostumbrada a ser la entrevistadora, hoy se sienta frente al Canal del Caballo España, para compartirnos detalles de su vida y su vasta experiencia en esta brillante carrera.

¿Valeria, siempre has tenido esa conexión con los caballos, o es algo que llegó después con los años y qué te motivó a especializarte en esta área?

Mi relación con los caballos y el campo comienza desde pequeña, mi familia materna siempre tuvo relación con el campo, por lo que nuestras vacaciones desde niños eran en el campo, siempre me gustó montar. Siempre me gustó participar en el trato con el ganado vacuno y las ovejas. Pero no tenía en aquel entonces contacto con caballos de pura raza. Solía montar caballos mestizos, pero desde pequeña siempre me gustó montar. Soy de Santana do Livramento en la frontera con Uruguay, la ciudad de Rivera, y allí la relación entre los caballos y el campo es muy fuerte.

¿Hay algún momento o experiencia específica que consideres un hito importante en tu carrera y pasión por los caballos?

Nada en nuestras vidas sucede por casualidad. En mi trayectoria como periodista, yo trabajaba como reportera de noticias, como presentadora de programas de televisión. Y un día me invitan para conducir un programa sobre caballos de Raza Criolla. En ese momento era solo de esa raza, y ahí podríamos decir que fue donde comenzó mi trayectoria periodística junto a la relación con los caballos. Hay varios momentos que podría destacar en esta trayectoria de 20 años. Por ejemplo, cada criador que conoces, cada raza con la que trabajas, es una experiencia de aprendizaje. Pero realmente valoro el comienzo de todo. Los primeros viajes internacionales, las incursiones que hice a Chile, las visitas al Criadero Agua de los Campos Maquena al Criadero las Callanas. Estos viajes fueron muy importantes para profundizar en mis conocimientos. Después vinieron otros viajes internacionales a Oklahoma a Kentucky en los Estados Unidos, donde tuve la oportunidad no sólo de conocer otros caballos, sino de conocer otros tipos de competiciones y disciplinas ecuestres, como también otras culturas, esto suma mucho, por eso destacaría esos momentos de mi carrera profesional.

¿Cómo ha influido tu trayectoria personal y profesional en el mundo de los caballos en tu forma de ver la vida en general?

Respecto a esta pregunta de cómo mi relación con los caballos ha influido en mi vida personal, ¡es total! Porque cualquiera que conozca este mundo de los caballos, sabe lo intenso que es. Por ejemplo, la mayoría de nuestras grabaciones son los fines de semana, por lo que nuestra vida social, digo nuestra, porque mi marido es el director del programa de caballos que yo conduzco.

Así que Jônio Salles, mi marido, y yo tenemos toda nuestra vida social, unida al mundo de los caballos y a los eventos ecuestres de todas las razas, ya no solo de la raza criolla, como fueron los inicios.

El programa ahora está abierto a todas las razas, lo que abre un abanico más amplio de eventos y competencias.

¿Cuáles fueron las mayores dificultades que enfrentó a lo largo de su carrera y cómo superó estos desafíos?

El primer desafío que me tocó enfrentar fue sin duda el lanzamiento del programa. Había mucha gente que pensaba que esto no iba a funcionar. Era el primer programa de la televisión brasileña que hablaba de caballos, un tema de nicho. Pero a pesar de las dudas, el programa demostró que era un proyecto con audiencia y que había sido una buena idea. Desde aquellos inicios, ya han pasado dos décadas y continuamos creciendo y fortaleciéndonos, seguimos en la televisión en el canal Bandeirantes, en Canal Terra Viva, un canal abierto y un canal segmentado. Y también nos hicimos fuertes en YouTube, donde nuestro canal cuenta actualmente con más de 634 mil suscriptores. Somos el canal de caballos con más audiencia y más grande de Latinoamérica. También estamos volcados en las redes sociales, como Instagram, donde también hacemos un trabajo intenso, por eso el mayor desafío es mantenernos actuales. Y siempre estamos buscando mejorar para seguir siendo atractivos, para aquellos que nos siguen y nos contratan. Siempre intentando atraer más gente a este mundo, y gracias a esto, podemos decir que somos un medio informativo en que nuestro público confía.

¿Cómo cree que evolucionaron las prácticas de manejo y cuidado de los caballos a lo largo de estos 20 años de tu carrera?

En ese sentido, debo decirte que ha habido una mejora en todos los sentidos. En términos de selección genética, en términos de nutrición y alimentación. Por ejemplo, cuando se trata de alimentar bien a una yegua para que pueda producir un buen deportista de alto rendimiento. Los domadores hoy en día tienen muchísimo más conocimientos y recursos para trabajar con los animales. Eso uno lo ve en la genética, en el entrenamiento y presentaciones. Hoy, las competencias son verdaderos espectáculos.

La equitación es una práctica que implica mucha disciplina. ¿Cómo aconsejas a los nuevos Jinetes y Amazonas para que se mantengan motivadas y centradas en el entrenamiento?

Creo que el primer paso para mantenerse motivado es disfrutar de lo que haces. Hay que amar a lo que te has dedicado, si lo que haces es montar, o entrenar caballos, eso hay que hacerlo con dedicación. Y estar siempre desafiándose a sí mismos, buscando nuevas técnicas, nuevos recursos con los que trabajar. Creo que un profesional, y eso no sólo de los caballos, cualquier profesional, se “muere” cuando cree que ya lo sabe todo. Entonces tenemos que estar siempre actualizándonos y reciclándonos y esto sin duda nos dará la motivación para continuar.

¿Cuáles son tus preocupaciones para el futuro del mundo del caballo, especialmente en relación con la implementación de nuevas tecnologías e innovación en este sector?

Mi preocupación respecto al futuro, al mundo de los caballos, es mostrar a las personas que pueden estar alejadas del mundo del campo, por vivir en la ciudad, y que por esta razón no siguen de cerca el trabajo con los caballos. Es mostrarles como se cuida hoy en día a estos animales, ya que quienes no conocen este mundo, pueden llegar a pensar que los caballos no son bien tratados. El mundo del caballo hoy en día genera muchos puestos de trabajo, y se da muchísima importancia al bien estar animal. Las personas que no conocen todo esto, pueden llegar a pensar que no hay razón de hacer eventos ecuestres, competencias, etc.

En nuestros reportajes, en nuestras historias, hacemos hincapié en mostrar todo lo que hace el criador, por sus animales, desde que nacen. Cuanta inversión, en veterinarios, en fisioterapeutas, domadores.

En fin, todo el trabajo y amor que existe en torno al caballo. Por eso creo que es fundamental concienciar a la gente sobre la importancia de la buena cría de caballos. Dar a conocer también al caballo no solo como fuente de ocio y competición, a través del deporte, sino también para temas de salud. Hemos podido apreciar y mostrar en nuestros programas los maravillosos resultados de la equinoterapia. Como esta ayuda por ejemplo en los pacientes con autismo, dando grandes resultados. El caballo, es sin lugar a dudas, bueno para la salud física y mental. Y eso nosotros que somos comunicadores, promotores, y formadores de opinión pública, tenemos la obligación de mostrar todas estas nuevas terapias que se están realizando con los caballos. Y el porqué, desde tiempos inmemoriales, lo importante que el caballo ha sido y sigue siendo en nuestras vidas.

Además de ser una experta en el mundo de los caballos, ¿hay otras actividades o aficiones que realizas para mantener el equilibrio y la motivación en tu vida?

Bueno, tengo tres hijos. Una chica que ya es licenciada en psicología que ya no vive en casa, y trabaja.

La otra también estudia psicología, ella si vive con nosotros, y el benjamín, Filipe, quién tampoco vive con nosotros, ya que está haciendo su carrera como futbolista. Para mí lo más importante en mi vida es mi familia. Siempre he acentuado lo importantes que son estos vínculos dentro del hogar.

Ahora mi pasión es también mi trabajo. Vivo y respiro caballos y aunque estoy de vacaciones, inevitablemente cuando me distraigo estoy viendo algo sobre caballos. Porque es algo que me encanta hacer, lo hago con gusto, lo hago con mucha entrega. Ahora si miro hacia atrás y puede que haya dejado de hacer muchas cosas por esta dedicación apasionada al mundo del caballo. Pero no me arrepiento de nada, creo que el viaje hasta aquí, valió la pena. Estoy muy feliz con todo lo que junto a mi marido hemos logrado, con la credibilidad que tenemos y estoy segura de que nos quedan por hacer aún muchas más cosas.